Tenemos ratones en casa. Es una novedad en cierto modo emocionante, sobre todo para los niños, que aún no han visto ninguno pero se imaginan mil formas de cazarlos. Miguel ha dejado por la mañana una trampa consistente en una lazada de medio metro de diametro con un trocito de pan en la punta. Al volver del colegio y no ver el pan en su sitio se resigna a su fracaso: en efecto, al poco tiempo aparece Gonzalo mordisqueando el mendrugo, duro como una piedra.
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Recibo un saluda del ayuntamiento en papel del caro, marca Conqueror, de ése que no se pueden permitir muchos novios, donde se nos felicita por anticipado a los docentes por nuestra "entrega y compromiso" y nuestra colaboración para que "como especie humana aspiremos a vencer nuestras miserias y a ganar cotas cada vez mayores de dignidad y realización". Reprimo una arcada y uso el reverso del saluda para escribir este apunte.
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En un diario debe caber de todo: ocurrencias, acontecimientos, reflexiones... con la única condición de que se escriban pacientemente, día a día, frescas y recién salidas del ingenio.
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Me encuentro cómodo instalado en el gris, hasta el punto de que temo la visita del blanco, y no digamos del negro.
Nota para lectores: que nadie piense mal.
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Todos los días un apunte al menos. Ésta es una buena máxima para combatir la pereza. Son tantas las cosas que convendría hacer una vez al día... y algunos alardean de hasta cinco veces diarias. ¡Qué país de fantasmones!
Monsieur RIDAO:
ResponderEliminar"... y recién salidas del ingenio".
¡Del que tenga ingenio, claro!
Yo ingenio no sé, pero genio... más que la Isabelita ídem.
Salu2 ingeniosos (jejeje, porque yo lo valgo)
Séptima acepción de ingenio de la RAE: "Máquina o artificio de guerra para atacar y defenderse". Pues eso, Dyhego. ¡¡Al ataqueerrr!!
ResponderEliminarMe malicio, José Miguel, que en el último apunte no te refieres a los musulmanes y su obligación de orar cinco veces al día. Seguramente te refieres a fantasmones venusinos. ¿Se cumple el "piensa mal y acertarás"?
ResponderEliminarUn saludo.
Se cumple, Luis, aunque no debería decirlo: la imaginación del lector debe volar con libertad. En este caso, me temo, todos los pájaros vuelan hacia el mismo sitio.
ResponderEliminarSi, al negro no lo dejes entrar, estoy de acuerdo. La disciplina de escribir algo todos los dias es como un mata demonios, algo que si no se hace, va ensuciandolo a uno poco a uno por dentro, con consecuencias muy variopintas.
ResponderEliminarUn saludo!
Pero que importante eres,Ridao,una casa con ratones,el ayuntamiento que te envía cartas en papel del caro y to,a mi solo me envía la factura de la basura,que bajeza,hasta me está dando una envidia que noveas.
ResponderEliminarBueno yo a lo que iba,a ver si dices que tienes ratones,pa auyentar a las visitas,que yo ya estoy invitá a pasá allí un veaneo,a lo ti pirulón,primero me pones que me tengo que bañar en una amberca,ahora que tienes ratones,¿ que será lo próximo?,acaso,me cruzaré en tu pasillo,con la maria antonia iglesias en desabillé,ya veo claro que no quieres que aparezca por tu casa,bueno arrieros semos y en el camino nos encontraremos.
Un beso ratonero.
Ridao cariño,por mi puedes tener en tu casa ratones o culebras,que me puedes invitar siempre que invites también al Escasso,allí estará la Paqui esperandolo,el Escasso me enamorá.
ResponderEliminarEn cierto modo Miguel ha cazado un ratoncito, aunque éste ha sido listo como el hambre y se ha llevado el botín, indemne.
ResponderEliminarEn cuanto al diario (íntimo y en papel), después de varios años escribiendo pacientemente el mío, llegué a la conclusión de que era mas sincera y mas íntima si dejaba asentar los acontecimientos. A veces me bastaba dos días, a veces cuatro...El ánimo me guiaba, por lo que se ve.
Y si, fantasmas a go-gó.Mejor tomarlos a guasa como se merecen.
¡Hala! A por esos ratones.
Muy buenas noches
Qué derroche, menos mal que al menos tú has reciclado el Conqueror. Deberían imprimir sus monsergas directamente en papel higiénico.
ResponderEliminarDile a Miguel que no se desanime, que cualquier día encuentra a Gonzalo mordisqueando el ratón.
¿He leído cinco?
¿Gazpacho o salmorejo?, estos apuntes están muy buenos. Son así, mezclados y con buen sabor.
ResponderEliminarPrefiero el gazpacho, como los que tú haces.
Un beso ,José Miguel.
Es verdad, Eutelia. Si nunca hubiésemos escrito nada no nos pasaría esto.
ResponderEliminarEstá bien, Rocío, puedes venir, pero con trampas para ratones, que hay que hacer sitio en la buhardilla...
Ya te ha dao fuerte, Paqui. Creo que vais a tener que quedar en persona, que el contacto virtual es altamente perjudicial para la salud.
Abrazos.
Mery: mi diario es mitad privado y mitad público, con una alta dosis de intimidad. El blog condiciona, desde luego. Me sirve de acicate para escribir (no lo haría si no fuera por él), pero condiciona muchas anotaciones.
ResponderEliminarHas leído bien, Álex. Cinco veces cinco...
Gracias, Lourdes. Dentro de poco habrá que pasar a las sopitas.
Abrazos cinqueños.
Ridao cariño,no vayas a meter a mi amiga Rocío en tu buhardilla con los ratones,a ella le gustan más los trasteros,y tiene interesantes historias sobre ellos.
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