¡Qué ajetreada vida
la del que gusta del mundanal ruido,
y sigue la torcida
senda, por donde han ido
los muchos necios que en el mundo han sido!
Ya en el siglo XVI Fray Luis de León cantaba a la vida retirada, y eso que no conocía los atascos, el estrés y los centros comerciales. En los cuatro siglos y medio que han transcurrido desde sus versos no ha hecho sino descender el número de sabios y aumentar el de necios, entre los que, por desgracia, me temo que me cuento.
¿Necio? Ni mucho menos,¡Si leerte es un regalo!.Creo que eres sabio y genio a la vez.
ResponderEliminarYo me remonto más, al Eclesiastés, y me digo (tal vez en busca de consuelo) que hay un tiempo para cada cosa. Además, pocas vidas tan ajetreadas como la de fray Luis. Una cosa es predicar y otra dar trigo.
ResponderEliminarY de necio, nada, caballero.
Os agradezco mucho vuestras palabras. No es que me considere necio en todo, pero en esto que decía Fray Luis sí; cada vez me meto en más jaleos, pienso que alguna vez pararé pero la cosa va a más.
ResponderEliminarAl menos soy consciente de mi necedad, y creo que ése es el primer paso para curarla.
Y lo de sabio y genio, CDL, qué quieres que te diga, vanitas vanitatis... Mi ego te lo agradece.
Necio?
ResponderEliminarVenga ya, un poco de sabio eres, y a mucha honra.
Un abrazo.
Vaya cagada de entrada,
ResponderEliminarel caso, ¿es crítica o halago?
Sólo el necio no distingue nada
Mas desde el trono do ca…
Lejos del ruido mundano
tu senda sigues ufano
Ricardo
PD. ya en el siglo XVI, en similar posición a la tuya, los atascos producían estrés
Lo de los centros comerciales me hace mucha gracia, porque es verdad, todo un fenómeno de nuestro tiempo. Ya escribió Saramago sobre ello ¿no? (yo no lo leí, lo confieso). Algún día haremos una revolución de las masas, siguiendo a Ortega.
ResponderEliminarTienes de necio lo que te arrastra este maremagnum, como todo hijo de vecino. Pero en particular no lo eres en absoluto, por lo que se asoma de tí en este blog.
Un abrazo, sigue así.
Gracias, Javier y Mery, basta que uno diga que es necio para que los amigos se lo discutan, así da gusto. Me parece que voy a airear mis defectos para que me déis moral.
ResponderEliminarRicardo, hoy no tenía pensamientos escatológicos, pero sabes que entro al trapo rápido. ¿Con que mundano, eh? ¿Con que ufano?
¡Pues agárrame tó el ban... con las dos manos!
Te merecías un premio. Un saludo bananero.
Buenas noche:
ResponderEliminar¿Necio?, claro que sí, los sabios "somos necios".
Bienvenido al mundo.
Mecachis en la mar, ya estarás contento con tantas alabanzas...
ResponderEliminarEn fin, buenas noches tenga usted.
Po sí, a partir de ahora no va a haber quien me aguante. De entrada, le he dicho a mi mujer que se puede sentir privilegiada de tener un sabio en casa, y que los sabios necesitan tranquilidad, y por supuesto las tareas del hogar son nocivas para la inspiración.
ResponderEliminarUn abrazo sapiente.
¿Y qué te ha dicho tu mujer?
ResponderEliminarHay palabras que me niego a transcribir en un blog serio y decente como éste.
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