Por eso hemos de saber saborear cada segundo aunque se nos escape y ya no podamos atraparlo. El tiempo es el corazón del misterio. En él estamos deambulando perdidos. Saludos.
Si lo aprovechamos como debemos vale infinito!!! a ver si este año es el año "del provecho" y todo cuanto tengamos el placer de disfrutar sea exprimido al máximo.
Me encantó, José Miguel, en la simpleza de lo dicho está encerrada la magnificencia del buen vivir y grandeza de la vida... ¿Qué más hace falta para ser feliz?
¡FELIZ AÑO NUEVO! Por enésima vez, pero con placer :)
Besotes.
P.S.: El margen derecho de tu poema existencial tiene la forma de un vientre abultado de mujer... ¿Será un presagio?
¡¡¡ARRRGGG!!! ¡Qué susto, Liliana! No me había dado cuenta. Verás cuando lo vea Lola, que se ha ido a trabajar. Estoy por llamarla. Para que veas que no soy rencoroso, te vuelvo a felicitar el año.
Pues que tu vida sea una sucesión de segundos de esos que valen mil años ... por lo intensos e inolvidables. Saludos cordiales.
ResponderEliminarDesde la isla hasta estos Andurriales ....Bienvenido 2010 !!!!
ResponderEliminarakemashite omedetooooooooooo godai masu Ridao san !!!!!!!!!!!
Rosna
¡Felices 365000 días-años nuevos!
ResponderEliminarUn abrazo.
En una vida, cada segundo es un tesoro.
ResponderEliminarSaludos y besos recien estrenados, mi señor Ridao.
Por eso hemos de saber saborear cada segundo aunque se nos escape y ya no podamos atraparlo. El tiempo es el corazón del misterio. En él estamos deambulando perdidos. Saludos.
ResponderEliminarPues sí que tienes razón. Hay que apurar cada segundo como si fuera el último.
ResponderEliminarUn abrazo y feliz 2010.
Feliz 2010!
ResponderEliminarTu siempre sumas y eso es un placer en este medio.
Un abrazo estrenando este día uno tan solo de todos los que nos aguardan.
Feliz 2010 de-de-de-de nuevo.
ResponderEliminarMuchas gracias por tus bonitos deseos, Zim. Feliz año nuevo para ti.
ResponderEliminarFeliz año para ti también Rosna, ahora que estamos los dos en 2010. Y que sigamos leyéndonos...
ResponderEliminarCon que sean felices la mitad me conformo de sobra, Antonio. Que tú también deisfrutes de los momentos felices del nuevo año, y que sean muchos.
ResponderEliminarBonita y certera frase, Maile. Lo único que nos queda es apreciar ese tesoro. Que tengas un año muy feliz, y que encuentres todos los tesoros.
ResponderEliminarBienvenido, Joselu, la primera sorpresa de 2010. "El tiempo es el corazón del misterio". ¡Qué gran y poética verdad!
ResponderEliminarOtro abrazo, Juan Antonio. Seguro que en 2010 apuramos juntos muchos segundos inolvidables.
ResponderEliminarOtro gran abrazo, América, a través del océano pero compartiendo las horas. ¡Que seas feliz en 2010!
ResponderEliminarBueno, Álex, pero ahora nos felicitamos en 2010. Os deseo lo mejor, mi AMIGO.
ResponderEliminarSi lo aprovechamos como debemos vale infinito!!! a ver si este año es el año "del provecho" y todo cuanto tengamos el placer de disfrutar sea exprimido al máximo.
ResponderEliminarBesos
Cita
Siempre más, Ridao
ResponderEliminarMe encantó, José Miguel, en la simpleza de lo dicho está encerrada la magnificencia del buen vivir y grandeza de la vida... ¿Qué más hace falta para ser feliz?
ResponderEliminar¡FELIZ AÑO NUEVO!
Por enésima vez, pero con placer :)
Besotes.
P.S.: El margen derecho de tu poema existencial tiene la forma de un vientre abultado de mujer... ¿Será un presagio?
Ojalá sea así, Cita. Al menos que lo intentemos. Feliz año de nuevo.
ResponderEliminarSiempre cabe más, Julio, mucho más, hasta el Titanic.. Un abrazo, figura.
ResponderEliminar¡¡¡ARRRGGG!!! ¡Qué susto, Liliana! No me había dado cuenta. Verás cuando lo vea Lola, que se ha ido a trabajar. Estoy por llamarla. Para que veas que no soy rencoroso, te vuelvo a felicitar el año.
ResponderEliminarUn abrazo acojonadísimo.