Soneto con gazapo
Un verso he escondido en esta tanda
que está aquejado de una hipometría;
o acaso es que se cuenta en demasía.
Os puedo prometer que cojo anda.
Si no lo veis a la primera manda
cojones vuestra poca maestría;
bien poco entendéis de poesía
por mucho que de ello hagáis demanda.
Alguno va poniéndose nervioso;
ya sólo van quedando dos tercetos
para atrapar el verso misterioso.
Nada hay más fácil que leer sonetos
y en cambio parecéis unos viciosos.
¿Queréis dejar los dedos quietos?
Hola Ridao.
ResponderEliminarDe poesía no ando fino
Más me gusta la adivinanza
Creyendo yo tener tino
Al cuarto verso le falta panza.
Je,je.
Por cierto, muy original. De vez en cuando esta bien recuperar la métrica y la rima.
ResponderEliminarSaludos
Muy bueno. Quevediano.
ResponderEliminarY también el comentario de Torcuato.
Un abrazo
Qué bueno el último verso, maestro.
ResponderEliminarUn abrazo.
Me la has puesto fácil, Ridao, o como decimos por aquí "me la dejaste picando" (por pelota = balón). El caso que el verso escondido es el último:
ResponderEliminar"¿Queréis dejar los dedos quietos"?
La clave está en el el segundo verso del soneto:
"que está aquejado de hipometría..."
En cristiano, hipometría, es una alteración muscular, que a causa de movimientos imvolutarios, impide a la persona llegar al objetivo que se propuso. O sea: ¡No puede dejar los dedos quietos!
Todavía me asombra que hayas escrito un soneto para hacer una adivinanza. Este blog es una caja de Pandora :)
Me encantó, José Miguel.
Besazos hipométricos (ojo, no sé dónde caerán, jajajajja)
Pues yo me alío con Torcuato;
ResponderEliminarecho la cuenta dos veces
y sílabas me salen diez,
no en el tercero, en el cuarto.
Mas veo que también Liliana
de razón no anda escasa:
paréceme que este soneto
cojea de ambas patas.
Saludos
¿El cuarto del segundo cuarteto?
ResponderEliminarBesos...
¡Tramposo¡...
ResponderEliminarEs Vd. un genio Sr. Ridao.
Más besos
¡Ñoco! Yo he tardado trece versos en encontrarlo y tengo tortículis en los dedos.
ResponderEliminarSoneto con gazapo para niño agazapado en brazos de amigo hipométrico... que lo llamaría yo.
ResponderEliminarEres un genio, mamoncete.
Y con permiso no pedido,al jefe del blog:
ResponderEliminarUn beso Capitán...que como no puedo ponerlo en tu blog..lo pongo en el de tu colega Ridao...que seguro que vienes por aquí.
Besos, José Miguel(perdón y gracias)
Ridao, yo ando loco con el metro y no me aclaro: ¿Porqué métrica es de metro, no?
ResponderEliminarUn abrazo
Y es que sospechar del cojo
ResponderEliminares comprar las papeletas,
lo digo con el buen ojo
de uno que habla sin muletas.
Abrazos, querdio.
La entrada, por cierto, es de una genialidad como pocas he leído nunca.
ResponderEliminar¿Querdio, Juamna?
ResponderEliminar?Orta etarra¿
Sí, Ale, oh insigne ganador...pero ésta está ya institucionalizada y permitida por el DRAE (Diccionario Ridaoqueño Adaptado al Español).
ResponderEliminarAbrazos, querdio Ale.
Torcuato: el cuarto verso está en forma, ni gordo ni flaco. Yo pienso que la métrica nunca hay que olvidarla, y la rima... según te apetezca.
ResponderEliminarGracias, Ramón. Muy quevediano, pero sin premio.
Grasia, maejtro Fernando.
Liliana: te has vuelto a currar bien el comentario. Tu agudeza sigue siendo grande, y la definición de hipometría es desternillante.
Abrazos desternillados.
Bienveniso, Elías. Te aseguro que cojea sólo de una pata.
ResponderEliminarLo cogiste al segundo intento, mangeles. Eres muy rápida comentando. El Capitán no creo que venga: está en tratamiento de desintoxicación bloguera. Le transmitiré tus saludos cuando lo vea.
Me encanta lo de ñoco, Jesús.
Ñocoabrazos.
Álex: si no es por tu ayuda con el niño no escribo el soneto. Anda que no tienes mano...
ResponderEliminarDe metro, Rafael, pero con sílabas en vez de centímetros.
Muchas gracias, querdio. Devuelvo las papeletas. ¿Qué se habrá creído Álex? Esa palabra está institucionalizada (esta última no). Me hace mucha ilusión lo del DRAE. Que sepas que lo de ridaiku aparecerá en breve en letras de molde contigo como neologista.
Abrazos querdieros.
Retrifico mi etarra.
ResponderEliminarUn azabro... querdios aimgos.
Arragame el nabano... que hoy la cosa, en mi casa, va de mrepios.
ResponderEliminarDejémoslo, entonces, en que la palabra es institucional. Bueno, que sea lo que quiera, que para eso es mía: le concedo la libertad.
ResponderEliminar¡Agárramela con dignidad!
ResponderEliminarPor mí lo jedamos, señores.
ResponderEliminarSe va acercanando la hora de comer y dopemos pasar de tocamientos a atragantamientos a la menor tisdracción.
Un azrabo a rambos.
Gracias jefe...dele besitos de mi parte al Capi.Gracias otra vez
ResponderEliminarPd. ¿desintoxicarse?...CAPI QUE TE JOAN....pero si ......sommos grandes ,buenos,geniales,reales..
maravilloso...¡CAPI BOBO¡
Mira que me gusta leer poesía de vez en cuando, pero nunca me ha dado por ponerme a contar versos. De todas formas, desde mi escasísimo saber y entender, es el último...
ResponderEliminarUn saludo.
Un nabazo, Álex.
ResponderEliminarLe diré todito, mangeles.
Po zi, el último, Alegre. El ejercicio de dedos es saludable.
Abrazos.