Vaya por delante que la llamada crisis de los pepinos es un drama para mucha gente que vive directa o indirectamente del cultivo de hortalizas, y que existe una terrible indefensión ante decisiones precipitadas de gobiernos extranjeros, cosa que podría haberse evitado en parte si el gobierno español hubiera reaccionado a tiempo. Vale. Pero no he podido evitar estallar en carcajadas esta mañana cuando he abierto el periódico a la hora del desayuno y he visto esta foto de la consejera de agricultura merendándose un pepino en una finca almeriense. Me callaré los primeros comentarios jocosos que me sugiere la fotografía. Por lo demás, nunca ha habido consejera tan identificada con el pueblo: si me dicen que es una jornalera del campo me lo creo, al menos por la pinta. En cuanto al tipo que está detrás saboreando otro pepino, sobreactúa un poquito, tampoco creo que un pepino crudo sea para relamerse, cualquiera diría que se está comiendo una langosta. Y así, en general, esta escena me recuerda a cualquiera de los capítulos de Los Simpsons en la central nuclear, con las radiaciones flotando por todos lados y el bueno de Homer enchufado a una máquina. ¡Políticos tenemos...!
Monsieur RIDAO:
ResponderEliminar¡Ah1 ¿Pero los pepinos se comen...?
Salu2 escandaliza2
Sí, astarnúo (ver diccionario andurrialero).
ResponderEliminarEso es lo malo que el gobierno no ha reaccionado, cuando lo hace lo hace tarde y mal, como siempre. Ahora aunque rectifiquen el dañp yá está hecho
ResponderEliminar¿El pepino se come sin pelar? No sé, yo le quito lo verde. ¿Los teutones saben esto? Digo lo de pelar el pepino. En fín, como dice el dicho popular: eres mas amargoso que el culo de un pepino.
ResponderEliminarUn saludo sin comentarios jocosos.
En mi tierra somos más 'fisnos' y mandamos al personal a 'que te den por donde amargan los pepinos' que, deduzco la zona, pero en mi ignorancia confieso que no sabía que los pepinos amargaran....
ResponderEliminarMi descojono, o despepino, ante la misma foto fue anoche. Me fui a la cama partiéndome. Creo que esta mujer va a lamentar esa foto toda su vida.
ResponderEliminarUn abrazo.
¿Y si le echamos un poquino de sal -como se ha hecho toa la vía-?
ResponderEliminarSe iba a enterar el bicho ese.
En cuanto a la consejera, mejor no meneallo.
¿Señor, señor, qué cruz!
jajajaja...y la de la derecha como pensando "vamos chicos, no es para tanto"
ResponderEliminarYo de chaval, trabajé en una frutería que había en la calle San Eloy esquina a Fernan Caballero. Allí tenía una clienta que siempre me decía: "dame un pepino bueno pa mí y otro pal gazpacho"
ResponderEliminarEstá claro que a la Consejera le falta uno y el que está detrás piensa en el pepino que le falta a la Consejera.
Saludos pepineros sin premio.
Desastre gigantesco para mucha gente. Prepotencia germana indecente y debilidad hispana...
ResponderEliminarPor cierto, los pepinos crudos en ensalada están buenísimos. Me he cenado uno hace un rato. Son muy depurativos.
Un saludo.
Aurora: en cuanto salió la noticia Zapatero tenía que haberse hecho una foto comiéndose un pepino. No sé si hubiera servido para algo, pero lo que nos habríamos reído...
ResponderEliminarYo también le quito lo verde, Naranjito, pero he estado investigando y los entendidos en ensaladas de postín dicen que hay que servirlos en rodajas enteras. Yo paso, los seguiré pelando, con perdón.
Bienvenida, eMe. Por aquí se dice lo mismo, y mandamos al mismo sitio al personal. A mí tampoco me ha amargado nunca el culo de un pepino, con perdón.
Po zi, Fernando, y además la cara de malaje que pone mientras se mete tor pepino en la boca...
Pero cruz, Elías. Menos mal que nos da por reírnos, pero los agricultores estarán descojonados por el suelo, vamos...
Pues es verdad, Eutelia, la de la derecha es la "tapada" de la foto. Yo creo que se estaba descojonando por dentro. Igual era una espía alemana.
Vaya cadena de pepinos que sobran y falta, Rafael. ¿Le dabas los dos pepinos diarios a tu clienta?
A mí me encantan, Alegre, y recién cogidos del campo son exquisitos. Me pasaría la vida comiendo pepinos, con perdón.
Abrazos apepinados, con perdón.
Talmente se estuvieran comiendo un heladito de chocolate. Qué cuajo tienen estos políticos, de verdad.
ResponderEliminarUn abrazo
Cuajo es poco, Mery, es que son tontos hasta para comerse un pepino, que ya es decir.
ResponderEliminarDesaparecer la Paqui y ponerse el pepino en crisis, ha sido todo uno.
ResponderEliminarPaqui, sto solo lo arreglas tú.
Coge los mandos de la nave.
Es verdad, Escasso, Paqui está missing. Si no ha acudido al reclamo del pepino es mala cosa. ¡Paaquiiiiiiii!
ResponderEliminarPos que no se crea la Merkel,que el boicot a los pepinos malagueños,no va ser vengao.Que se prepare,de momento ya le hemos quitao ar Van Nistelrooy de la busdesliga,la venganza malacitana ya tiene jornadas de puertas abiertas,aquí van a caer rayos,truenos y centellas,y no cuento mas,que an luego to se sabe,pero que sepa la teutona que aquí disponemos además del poderío economico del jeque,y vamo a tirá la casa por la ventana,lo mismo hasta hacemos desaparecé Alemania del mapa.
ResponderEliminarTenemos hasta pensao irnos a la plaza cataluña,con los indignaos y hacer la gran pepinada,como indignaos pepineros que semos,y que no se atreva el sheriff catalán a vení a echarnos,ese mister proper,proclamao canciller del algodón,con sus limpiezas masivas,que lo mandamos a Honduras,con los supervivientes pa que aprenda a sobreviví.He dicho.
Leña ahí, Rocío. La Merkel lo que tenía es que hacerse una foto con un buen pepino en la boca, coño, como nuestra consejera...
ResponderEliminarPozí Ridao,la Merkel debería hacerse la afoto con un pepino en la boca,y otro en el culo,y luego decirnos a los malagueños,cual de los dos pepinos le gustó mas,entonces,nosotros así actuaremos.Que le gustó mas el de la boca,pos le mandamos 2 kilos gratis,pa que los saboree.Que le gustó mas el de la parte trasera,pos en ese caso le mandamos 100 kilos de regalo,pa que se lo pase bien con nuestros pepinos,que en Málaga semos múuuu rumbosos.
ResponderEliminarUn beso pepinoideal.
Po zi, Rocío, yo creo que a lo mejor le gusta y todo. La tía asquerosa...
ResponderEliminar