Plácido Domingo tenía una voz para triunfar: un timbre vibrante, incorparable, un fraseo dulce, unos armónicos bellísimos, un talento innato y una capacidad de trabajo fuera de lo común.
Y triunfó, porque era perfecto, tan perfecto que se ha buscado cualquier resquicio para criticarle, pero siempre estará entre los más grandes.
Dicen que la zarzuela es el género chico. Eso dicen.
Aquí canta con 66 años.
Los cantos alegres de los zagales aumentan siempre la pena mia, y mi amargura vivo llorando con la ilusión perdida.
Monsieur Ridao, yo, que no entiendo de música, me siento transportado y todo.
ResponderEliminarSaludos zarzueleros.
Pues me vuelvo a alegrar, Dyhego, y lo mejor para disfrutar de la música es no entender de ella.
ResponderEliminarAbrazos laparraleros.
AHora no puedo escuchar el vídeo, pero vamos...AMEN
ResponderEliminarUna maravilla de romanza, Mery.
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