Iba yo ayer por la mañana paseando tranquilanente a mi bebé por la calle cuando vislumbré de lejos una masa de gente que se acercaba por la avenida. Cuando estuvieron más cerca vi que se trataba de una manifestación, con sus tambores, banderas, pitos y demás parafernalia. Poco a poco los gritos fueron haciéndose inteligibles, y pude reconocer las consignas que vociferaban los manifestantes:
- Si esto no se arregla... ¡GUERRA, GUERRA, GUERRA!
- Si esto no se apaña... ¡CAÑA, CAÑA, CAÑA!
- ¡LA PRÓXIMA VISITA, SERÁ CON DINAMITA!
- ¡A POR ELLOOOOS, OOEEEE, A POR ELLOOOOS, OOEEEE!
Al margen del consabido tufillo ripioso de los eslóganes, me sorprendió su contenido: parecía que estaban en pie de guerra, una cosa mala, oigan. Ni en los mejores años de la CNT. Claro que a éstos se les va la fuerza por la boca, no llevan -espero- bombas en los bolsillos ni maquinan atentados y magnicidios. Lo que más me fastidia es que van por ahí exigiendo que les arreglen las cosas, como si ellos no tuvieran arte ni parte, como si cerrar una empresa debido a la crisis fuera un ataque del capitalismo al proletariado. ¿Proletariado, digo? ¡Eso era en el siglo XIX, en las fábricas inglesas que tan bien dibuja Dickens! Lo de aquí es más bien acomodación.
A medida que la manifestación se alejaba, y mientras me cruzaba con los rezagados que habían roto filas y se dedicaban a piropear (o más bien increpar y zaherir) a las madres paseantes de buen ver, se me ocurrió que se podría organizar una contramanifestación con el siguiente lema:
- ¡QUEREMOS MÁS CULTURA, Y MENOS CARA DURA!
P.S. Los manifestantes llevaban las siglas de CCOO, pero por mí como si llevaran las de UGT, CNT o las Juventudes Hitlerianas. Vamos, que me fijé en las personas, no en los símbolos.
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Hace 12 horas
17 comentarios:
Tienen un morro que se lo pisan. Buenos días y al tajo los que podemos.
Son los del sector provincial del metal. Aquí tienes las razones por las que se protestan.
Para resumir, es una cuestión fundamentalmente económica, como siempre. Los empresarios ofrecen subida del IPC real y los sindicatos quieren una subida del 2,75% (el IPC previsto más 0,75 y sin ajustes al IPC real en caso de que sea menor del 2%) en un año donde la inflación será negativa. Con dos cojones.
Un abrazo
Bueno JM, está claro que en esta ocasión hago mía tu opinión.
Creo que algún día alguien debería evaluar que cuesta al país cada palabrita que sale de la boca de nuestros insignes dirigentes sindicales.
En nuestra juventud Emilio Aragón puso de moda aquello de "menos samba e mas trabalhar", algún día tendremos que ponerlo en práctica, al menos la segunda parte.
Monsieur RIDAO:
Cuando las cosas están mezcladas no se puede hacer nada serio.
Intento explicarme mejor:
1) Los sindicatos reciben dinero del Estado.
2)¿Cómo van a morder la mano del que les da de comer?
3)De cajón ¿no?
4)Podrán ladrar, hacer el paripé, "escenificar" (que se dice ahora), utilizar esas palabras tan bonitas "camarada, proletariado, compañeros,todos somos obreros y gaitas de ese jaez".
5)Los primero sería financiarse exclusivamente con las aportaciones de los miembros de los sindicatos (Parece evidente ¿no?).
6)Que ningún dirigente sindicalista deje de trabajar del todo (nada de liberados)
7) Yo he estado a punto de sindicarme en alguna ocasión pero...
8) Lo mismo pasa con las ONG's. No se deberían llamar No Gubernamentales desde el momento en que reciben subvenciones vía IRPF. Lo mismo, ¿como van a morder la mano etcétera?
9) Estuve a punto de afiliarme al SIDI (Sindicato Independiente de Interinos).
Un saludo a lo Cándido Méndez (con ese corpachón (...) seguro que me deja hecho un bocadillo,jejeje.
Di que sí, Aurora, como no generen riqueza los que van al tajo vamos listos.
Me dejas flipao, Tato. Yo creía que había cierres de por medio, y resulta que quieren que se les suba el sueldo, y eso enmedio de la crisis. ¡A eso se le llama solidaridad! Y que le den por culo a los compañeros que están en el paro, claro.
No me acordaba de esa frase de Milikito, Capitán. Y habla por ti solo, por favor, que yo estoy en plena juventud.
Magnífico decálogo, Dyhego, aunque tenga nueve puntos. Lo suscribo, por supuesto.
Abrazos.
Monsieur RIDAO:
Y acabo de oir por la tele que el ministro Gabilondo quiere que la enseñanza sea obligatoria hasta los 18 años (como en Portugal, ha recalcado que retintín). Han entrevistado a miembros de Comisiones, de UGT, de ANPE y de la asociones de padres (y madres, abuelos, tios, madrinas, hermanos mayores, tutores etc) y TODOS han dicho que sí, que muy bien, que perfecto.
¿SE PUEDE SER MÁS GILIPOLLAS, ELECTORALISTA, MEMO, DEMAGOGO...?
¡Pero si a los 14 años habría que poner a trabajar a más de uno (y más de dos elevado a n)!
¡Está demostrado que más allá de los 12 años ya no hay forma de abligar a estudiar a un niño1 ¿Los vamos a tener hasta los 18 paseando libros, saltando vallas para fumarse porros?
Que lo digan claro: hay mucho paro y una forma de quitarse a varios millones de posibles trabajadores es ponerlos a estudiar obligatoriamente. Si no hay más gaitas, o ¿es que el Gabilondo cree que somos tan piiiiiiiii como él?
¡Que pesambre que tengo ahora mismo!
Totalmente de acuerdo contigo, Dyhego, te acompaño en el sentimiento, en el sentido literal de la expresión.
José Miguel, y el comunista Torrijo el que manda más que el Alcalde de Sevilla, con la "colaboración del contribuyente/a", participó con los juerguistas, no con su persona, les mandó unos vehículos del Ayuntamiento llenos de ruedas de coches viejos para intoxicar a las personas que SI nos levantamos a TRABAJAR. A estos impresentables hay que cortarles el pienso, al INEM directos.
Ten cuidado con el niño, cuando veas una "masa" vete a tu casa.
Abrazos
Dyhego me ha quitado de la boca los dos primeros puntos de su decálogo, pero todavía me queda algo que decir. El sindicalista en España es corrupto, es vago e inmensamente acomodado. Como pueden luchar por el proletariado cuando alimentan sus gordas barrigas de burgueses... y ellos siguen con su socialismo. Y no lo digo por decir (además de estar cabreado por los malditos atascos), sino porque conocidos míos vivieron del sindicalismo y dimitieron por el noble sentido de la moral y de la ética. Menos huelga a la española y más a la japonesa.
Un saludo Ridao
La agresividad no entiende de siglas, Ridao
¡Qué pena!
¡Y podían estar leyendo el Quijote!
¡Gabilondo al paredón, que le estrujen un cojón!
Bombas; no.
Coacción, amenazas, tornillos, tuercas, tirachinas y malaleche; sí.
Por estos lares tenemos manifestaciones "todos los días", y no una, sino hasta diez por día... hay que imaginarse los que es transitar por Buenos Aires, pufff.
Pero lo más sobresaliente es que los sindicalistas, son ¡exactamente como por allí! Una sarta de caraduras corruptos que lo menos que hacen es representar a los trabajadores.
Sólo saben darle al bombo, y cuando pueden (que siempre) al tinto.
Me pliego a tu lema, pero no sé cuántos acólitos juntaríamos en una marcha llevando libros en las manos...
Besooos.
(Tengo trabajo hasta la coronilla y me he perdido algunas entradas tuyas. Prometo leerlas, no me las perderé por nada.)
Tienes razón, Pasión, de las masas hay que huir, y más llevando un niño.
También hay sindicalistas buenos, Antonio, y la prueba son tus familiares. Lo malo es que se lo ponen muy difícil algunos "compañeros". En cuanto a la huelga a la japonesa, tengo mis reservas.
No entiende ni de siglas ni de letras en general, Julio.
Y que a Gabilondo le estrujen el mondongo también, Javier, y que se lean el Quijote en vez de tocarse el cipote.
Sí, Álex. Esperemos que no pasen de ahí.
Una vez más me demuestras que en todas partes cuecen habas, Liliana. Oye, y no te sientas obligada a leer todas mis entradas, que soy tela de pesao escribiendo.
Abrazos a tutiplen.
Es de agradecer que tu nene sea aún muy pequeño y que no haya asimilado NADA de lo que vió.
Un abrazo
Sí, Mery, lo malo es que antes o después habrá de verlo.
Otro abrazo.
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