Una hondonada de verdor donde canta un riachuelo
Colgando caprichoso de las hierbas los jirones
De plata; donde el sol de la orgullosa montaña
Brilla: es un pequeño valle que espumea con los rayos.
Un joven soldado, la boca abierta, la cabeza desnuda,
Y la nuca bañándose en el fresco berro azulado,
Duerme; está tendido en la hierba, bajo la nube,
Pálido en su lecho verde donde llueve la luz.
Los pies en los gladiolos, duerme. Sonriente como
Sonreiría un niño enfermo, echa una siesta:
Naturaleza, acúnale con calidez: tiene frío.
Los perfumes no pueden estremecer su nariz;
Duerme al sol, la mano sobre su pecho
Tranquilo. Dos agujeros rojos en su costado derecho.
C'est un trou de verdure où chante une rivière
Accrochant follement aux herbes des haillons
D'argent ; où le soleil de la montagne fière,
Luit : c'est un petit val qui mousse de rayons.
Un soldat jeune, bouche ouverte, tête nue,
Et la nuque baignant dans le frais cresson bleu,
Dort ; il est étendu dans l'herbe, sous la nue,
Pâle dans son lit vert où la lumière pleut.
Les pieds dans les glaïeuls, il dort. Souriant comme
Sourirait un enfant malade, il fait un somme :
Nature, berce-le chaudement : il a froid.
Les parfums ne font pas frissonner sa narine ;
Il dort dans le soleil, la main sur sa poitrine
Tranquille. Il a deux trous rouges au côté droit.
3 comentarios:
¡Qué poema tan sencillo y trágico, monsieur Ridao!
Por cierto, ¿por qué has cambiado en el penúltimo verso "sol" por "suelo".
sol > suelo
soleil > sol
¡Gracias, Dyhego! Quiero creer que ha sido un lapsus, jeje...
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