miércoles, 21 de septiembre de 2011

Súplica


Si no sabes hablar, ¿por qué me llamas?
Destruyes sin saberlo mi esperanza.
¿No ves todos los días los jazmines
colgando de la tapia? Mil estrellas
parecen, tan brillantes con sus túnicas
recién lavadas por la lluvia blanca.

Si sabes que no puedo respirar,
¿por qué me ahogas en las aguas negras?
Disfrutas sumergiéndote en mi vida
y vienes a buscarme cada día
con pasos largos, la cabeza baja
y el frío de la noche en la mirada.

Si sabes que no pueden defenderse,
¿por qué les hieres de ese modo? Acaso
tienen ellos la culpa de mi suerte?

No puedo soportar tanto silencio.
Respóndeme por Dios, te lo suplico,
o deja que me apague en la mañana.

7 comentarios:

Dyhego dijo...

Monsieur RIDAO:
Mí no entender.
Mí pensar que tú hablar de Dios, sádico que mandarnos penalidades, pero final poema, mí no entender tampoco porque no saber quién ser "les hieres". ¿Ser estrellas? ¿Ser jazmines? ¿Ser Sol que matar rocio de jazmines? Mí no entender.
Mí mandarte regalo:
"me apague en la mañana...
tocar tú a mí la banana..."
Salu3

Rocío. dijo...

A vé que pasa aquí,de la Rocío que no mate ná,que yo tengo la sangre que me fluye hasta por los cinco continentes,yo creo que lo que quiere decí el Ridao es que dios,no le hace ni caso,pos mira chiquillo a mi tampoco,por si te sirve de algo.

José Miguel Ridao dijo...

Amo a ve, Dyego, Rocío, ¡que los poemas no están para entenderlos, coño, joder! A ver si no qué es eso de banana, pues cualquiera sabe...

Besos bananeros (que no en el banano).

Dyhego dijo...

Monsieur RIDAO:
Vale, aceptamos "pulpo" (poema) como "animal" (arte) de "compañía" (inexplicabilidad) pero aún así ¿nunca has tenido la curiosidad de seguir el rastro desde el poema al pensamiento del poeta?
Salu2 jazmineros

José Miguel Ridao dijo...

A mí no me ha pasado nunca. Dicen que en el momento en que se da a leer un poema deja de pertenecer al poeta, y es bueno que sea así, ¿no?

Un abrazo inexplicable.

Anónimo dijo...

No sé si conoces el poema "El Desconocido" de Pär Lagerkvist y tampoco si pudiese, de alguna manera,tener relación con el tuyo pero, ¿conciéndote?, creo, te gustará.

Un desconocido es mi amigo
uno a quien no conozco
Un desconocido lejano, lejano
por él mi corazón está lleno de nostalgia
Porque el no está cerca de mi
¿Quizá porque no existe?
¿Quién eres tú que llenas mi corazón de tu ausencia
que llenas toda la tierra de tu ausencia?

José Miguel Ridao dijo...

El poema es precioso. No sé por qué, me ha traído a la cabeza a Rilke. Más que relacionado, lo veo como la otra cara de la misma moneda, y tampoco sé por qué.

Muchas gracias por la visita y el regalo.