No hay pastilla para este dolor. Ni terapia. Ni remedio. No es dolor, es vacío, es pérdida inapelable. No hay descanso tampoco. Los recuerdos dulces se hacen amargos. Y duelen. Y no importa que pase el tiempo, como me decían. Si acaso lo acrecienta, porque estoy más lejos de la dicha. Quizás no es bueno haber sido tan feliz. No lo sé. Hace tiempo que ya no sé nada.
¿Es necesario reducir el consumo de carne? Un desafío nutricional y
socioeconómico
-
Por Pierre Levasseur El consumo de carne está en el centro del debate
científico y político. Numerosos estudios han demostrado que una dieta con
menos carn...
Hace 7 horas