Prefiro rosas, meu amor, à pátria,E antes magnólias amoQue a glória e a virtude.Logo que a vida me não canse, deixoQue a vida por mim passeLogo que eu fique o mesmo.Que importa àquele a quem já nada importaQue um perca e outro vença,Se a aurora raia sempre,Se cada ano com a PrimaveraAs folhas aparecemE com o Outono cessam?E o resto, as outras coisas que os humanosAcrescentam à vida,Que me aumentam na alma?Nada, salvo o desejo de indiferençaE a confiança moleNa hora fugitiva.Fernando PessoaLa cadencia del idioma portugués es hermosísima y melancólica. Pessoa conmueve en lo profundo. Es la palabra hecha sentimiento. Poesía en estado puro.
Yo también prefiero rosasa la desdicha diaria.Amor antes que mentira;flores frescas en el alma;pétalos de primavera;hojas de otoño doradasque alientan la indiferenciapor el ayer y el mañana.
11 comentarios:
Y yo, José Miguel, también prefiero rosas a la desdicha... Me gustan estas intertextualidades tuyas, o dicho de forma menos pedante, ver cómo de la literatura nace también la literatura.
Un abrazo, Javier.
¡Enhorabuena por tu "Blogeuína", que ya he leído gracias a la generosidad de Javier Sánchez.
Estás en un buen momento.¡ Aprovechalo!
Ay!la angustia,la abyecta rabia,la desesperación...
Maravilloso Pessoa.
Ohhh.
saludos
El corazón necesita rosas... pero al hígado le beneficia lo amargo.
Un saludo Ridao
Muchas gracias, Javier. Espero dedicártelo algún día. Voy a tener que abrir una etiqueta de "intertextualidades".
Lo intento, Veridiana. Gracias por el consejo.
Ramón: Ahhhhh.
Me quedo con el corazón, Torcuato. Al hígado, cerveza.
Luis: esos versos de Pessoa resumen una poética admirable. Yo intento seguirla, al menos.
Abrazos.
Cerveza dulce????
No, hombre, bien amarga, para criar bilis mientras el corazón se dedica a las rosas.
Gracias por enseñarme placeres y bellezas desconocidas, Ridao.Entiendaseme bien. A mi me encantan las tetas pijas enderazadas por oportunas cremas y los coños al modo de La Lozana Andaluza, ehhh.
Joder ahora me sueltan eso de explicatio non petita, maricona manifiesta...
Gracias Ridao
Para todo hay tiempo y lugar, Escasso.
Mira por dónde este poema me viene hoy como anillo al dedo, o como rosas para mi alma.
Me encanta esta frescura portuguesa. Tienes razón, la cadencia del acento hace el poema inrresistible.
Un abrazo
Me alegro mucho, Mery. La poesía también es útil. Un beso.
Publicar un comentario