Hay quien escribe porque se lo pide el cuerpo; otros para tener la esperanza de que les lean. También hay quien de esa manera se responde a preguntas íntimas, o conjura fantasmas que no le dejan dormir. Se puede escribir para la galería, o sólo para uno mismo, o para los amigos, la familia y las novias (¡ah, el género epistolar!). Los menos se ganan la vida con su pluma, y hacen, los pobres, de la escritura su medio de vida, vendiéndose al mejor postor, mientras que los escritores engreídos que han publicado cien libros vendiendo doscientas copias los desprecian por fuera y los envidian por dentro. Aún hoy sobreviven los
negros, que mantienen la fama de los escritores reputados a cambio de unas monedas. Los articulistas son currantes de la pluma, y se dejan unos esfuerzos que podrían valerles para glorias más duraderas y menos lucrativas. ¿Y dónde dejamos a los escritores blogueros? Los hay de todo tipo, desde el que no distingue la
b de la
v, ni falta que le hace, hasta el escritor encumbrado que abre un blog y se digna a compatir con el pueblo internetero su inconmensurable talento. Hay escritores incomprensibles, gnómicos, que se recrean en el retorcimiento; otros alardean de sencillez bajo la capa de una erudición trabajada; los hay pesados, hasta coñazos, amenos, superficiales, fantasmones, folletinescos, polémicos, falsamente inocentes (no existe la inocencia en la escritura), taimados, acarajotados (imprescindibles en verano); acapullados (los más); maravillosos (los menos), acomplejados, agilipollados, atormentados, infames, divertidos, incisivos, hombres, mujeres, moñas, incluso niños... ¡Qué bello es escribir!
16 comentarios:
De acuerdo, ¡qué bello es escribir! y lo agustito que se queda uno cuando relee lo escrito y le gusta y todo. Y ya es el colmo cuando algún internauta cae por tu blog y te deja unas palabras de cariño, de felicitación o de cosuelo. Y si no...pues lo dicho, ¡que agustito se queda uno!
Saludos
También he aprendido a escribir negritas.
Abrazos, querdio escritor.
Pues es verdad, ¡que bello es escribir!
Yo lo hago para mi y si alguien cae por mi blog, lo lee, de verdad le gusta lo allí expuesto y deja un comentario diciéndolo me siento tremendamente feliz.
No sé en que categoría encuadrarme, seguramente entre los coñazos, los acarojotados, los agilipollados o los inocentes.
Y tú ¿dónde te colocas?
Un abrazo
Lo de los negros te lo garantizo, Ridao.
Bella reflexión
Un abrazo
Yo no
No has dejado títere con cabeza. ¿Quién se atreve hoy a mirarse al espejo? Un abrazo.
¡qué bueno Ridao! y a escribir que son dos días... a mí de momento, "que me quiten lo bailao"(o lo "escribío",;))
Besos
Agustito igual que después de una buena rajada, Susana.
Tú sigue con tus cursivitas y tus negritas, querdio Juanma. Cuando aprenda te voy a responder en letra gótica color magenta.
Yo según me de, Rafael. A veces estoy acarajotado, y aunque sé que es mejor no escribir lo hago, otras estoy iluminado, con los cuernos retorcíos, almibarado, enamorado, esponjoso, esponjado, poético, trascendente... vamos, camaleónico.
Abrazos segúnmedeeros (que no es lo mismo que segúnmeaderos).
Gracias, Julio. Tú no, ¿qué? ¿¿Negro??
Antonio, lo que hay que hacer es mirarse en el espejo de Cenicienta, home.
No te lo quitarán, Marisa. Ni a mí. Y que le den a no sé quién, pero que le den.
Abrazos para dar y no quitar.
Ustedes vusotros sgui escriviendo que savei. Yo de momento me quedo con el gustazo de leeros. Aunque hay pesados, coñazos, amenos, superficiales ......, pensad en los humildes lectores que disfrutamos con vuestras palabras. Un abrazo desde lejos que hace mucha caló.
Tus palabras me han recordado una frase de G. de Nerval: "si antes de hablar hay que contar hasta diez ¿qué habrá que hacer antes de escribir?"
Un beso
Ozú Ridao,anda que no es dificil escribir,vamo yo eso de hilar las palabras,pensar lo que quieres explicar y llevarlo al papel,que quede bien,vamo a mi eso me parece dificilísimo,por eso admiro a la gente que se siente,y ale a escribir.Si yo tuviera que escribir el quijote,me daba un patatú.
Pa colmo,mi trabajo es de escribí muucho,y pensá muucho,cualquier día estoy en el paro.
Un beso escribidor.
Vueno, Naranjito, benga ya, no bayas a benirte avajo, baliente. Un avrazo.
No conocía la frase, Mery. Yo, personalmente, cuento menos para escribir que para hablar.
Pues si tu trabajo es ése despabílate, Rocío. ¿Qué esperas parta abrir un blog?
Avrazos de berdad.
Jo, José Miguel, qué difícil nos lo pones. No sé con cuál de esas terribles categorías identificarme. ¿No se puede escribir por una mezcla de todo eso: para que te lean, para matar monstruos, por un poquito de vanidad y porque si uno no escribe se revienta por dentro? Un abrazo, amigo.
Madre de mi vida! Anda que te has despachao a gusto con los blogeros y eso que son a los que mas cariño tengo... porque día a día se esfuerzan y me enseñan algo, me invitan a su mente, a su corazón, comparto conversaciones y conocimientos...
Si hay blogs de autopeloteo...
Hay gente necesitada de expresarse, porque no puede con lo "que tiene dentro"
Hay gente a la que nadie escucha y aquí si.
Algunos días encuentro perlas de sabiduría y todos sonrisas y risas... si no con unos con otros.
¡Yo de mayor quiero ser go-go de blog!
Pues tienes razón, Jesús. Lo difícil es medir bien las partes, para que el cóctel salga redondo.
Bueno, MPVX2, he puesto los dos extremos viciados. La mayoría de los blogueros está enmedio.
Abrazos.
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