Ese café, ese cafelito era la vida, cuenta Chano Lobato evocando unos tiempos casi olvidados entre flamencos jugando en Madrid una partida de dominó. En la mesa Luis el Compare, el Pata, al que su hija la Paquera le daba todos los días para su cafelito, y el padre de Manolo Caracol, Caracol el del Bulto, el mismo que cuando era mozo de espadas de Joselito el Gallo, al bajarse en Atocha del tren que venía de Sevilla recibió una pitazo y una vaharada de vapor que le dio de lleno, se encaró con la locomotora y le dijo: "Esos cohone, en Despeñaperros...." Casi na. Antes de la guerra los flamencos cantaban a los señoritos subidos en los pescantes de los coches de caballos. Cuenta Chano que iba subido en un coche al lado de el Peste y el cochero era Mojones, así no se podía aguantar. Mitos vivientes como Aurelio Sellé, que aprendió de Enrique el Mellizo la soleá de Cádiz, Vallejo, la Macarrona o Rosario la Mejorana.
Memorias recurrentes, un mundo pequeño donde todos se conocían y se hacían sitio a empujones en las juergas de los señoritos primero y después en los tablaos, como el sevillano Pasaje de El Duque, para después enrolarse en compañías que recorrían medio mundo paseando el arte de Cádiz y de Andalucía. La Perla, hija de Rosa la Papera, a la que le cantó Camarón: El cante por bulerías / Como lo decía la Perla / Nadie lo dirá en la vía. El Morcilla, bisnieto de el Mellizo, que se apuntó a la CNT antes de la guerra, como todos los del muelle, y tuvo luego que penar por el mundo para venir a morir a Cádiz, al barrio de Santa María que le vio nacer igual que a Chano, que no era gitano pero lo mismo daba, en aquella época no había que vendé cá para arrancarse por cantiñas y pegarse una vueltecita. Setenta años, una vida entera detrás de la guitarra y el baile para cantar por fin delante, como los buenos.
Ese Manolo Caracol que se viene arriba por bulerías y un chavalín que le responde, y venga fuerza, arte y compás, hasta que Caracol se levanta y empieza a hacer jirones su camisa que entrega como trofeo a un Chano adolescente. Muchas juergas, muchas borracheras, la mala vida de los flamencos que enterró a tantos antes de tiempo, y Chano que conoce a una bailaora de Sevilla que le para, todo lo que se puede parar a un chaval que trabaja todos los días hasta las seis de la mañana en el tablao, acordándose de Mojones el cochero y del señorito, mirando todos que no se gastara todo el dinero y quedaran al menos cinco duros para repartir. Incultura: mucha, como aquella vez en Londres que se creían que la flema era la flama y todos los ingleses iban encendíos. Mucho arte, pero también mucha miseria. No quería esa vida para sus hijos. El mayor, pobrecito, murió en Grecia en un accidente, y Chanito, el pequeño, le ha acompañado hasta el final con el oficio de su guitarra. Este mundo dejó de existir el día que se murió Chano y ya no volverá, para mal o a lo mejor para bien, que para pasar hambre siempre hay tiempo.
Fotos (de arriba abajo):
1. Reunión flamenca de los años 20. Al cante: Pericón de Cádiz. 2. Luisa la de Torrán y la Paquera. Carboncillo. Marvin Steel. http://bulerias-decordoba.blogspot.com.es/ 3. Enrique el Mellizo. Cuenta Chano que ampliaron este retrato para colgarlo en una peña y el Morcilla, que era su descendiente, quiso llevárselo, a lo que le dicen los de la peña: "Llévatelo si quieres, totá, lo que está haciendo es tapá con las orejas los desconchones de la pared".
Muchas gracias Ridao por la dedicación de la entrada, ya es la segunda que tengo tuya y cuando estés en el taco y seas un escritor de "éxito" podré venderlas o, al menos, ronear de ellas. Tengo la caña echá, con varias carnás, para ver si encuentro un libro impagable e imposible, casi, de conseguir de este mismo estilo pero de Pericón. Si lo encuentro será un placer compartirlo contigo y con todo aquel que, como nosotros, se sienta conmocionado por estas pequeñas pero encantadoras cosas. Un abrazo maestro, muchas gracias.
Gracias a ti, Rafael, por compartir, aunque lo de maejtro lo dejo para los flamencos. No te lo pierdas, que al buscar información para la entrada no encontraba nada de El Peste, hasta que di por Internet con un libro escrito en inglés: The Flamencos of the Cádiz Bay, escrito en los años 60, con más información que muchos libros españoles. En Internet sólo dan dos capítulos, creo que lo voy a pedir en Amazon.
Consideraciones sobre la duda
-
Cerámica. Alberto Bustos
Gracias a la duda avanzamos. Podemos utilizarla como herramienta de corte
contra las verdades monolíticas.
La duda debe ser ...
El universo y el amor
-
Si la arena de la playa fuera blandita como un colchón de pluma y el mar
tan inocuo como una piscinita, ¿para qué iban a tomarse el trabajo dos
amantes de ...
Oronja
-
Albert paró el coche junto a un bosque de castaños. Trepé un ribazo y
encontré las primeras oronjas. Una de ellas estaba por abrir: era un huevo
perfecto.
...
La Prisionera
-
Coincidiendo con la inauguración en el Thyssen de la exposición "Proust y
las artes", he completado la lectura de LA PRISIONERA y hemos empezado ya
LA FUG...
LA TEORÍA LITERARIA DEL JUGUETE ROTO
-
*Que la vida iba en serio uno lo empieza a comprender más tarde…*
Jaime Gil de Biedma.
.
Hay un cuento terrible del escritor ita...
Gorrión íntimo
-
Entre las muchas aves que habitan los parques de la capital no es imposible
advertir el vuelo recoleto y porfiado de este gorrión, cuyas alas abren un
hu...
Otro ensayo de despedida
-
*31/12/2020*
Ensayo de nuevo mi despedida de este diario, al que pretendo dejar de
acudir durante al menos un año, y ello por dos motivos: primero, porqu...
Final
-
Resultaría de mala educación hacer mutis por el foro sin dar más señales de
vida. Por ello, creo mi obligación dejar constancia de que ésta será la
última ...
Galdós, ¿moderno?
-
AL fin ha saltado a la palestra la cuestión. Ya se estaba haciendo
esperar: Galdós no es tanto como creen algunos en España, país
norteafricano. Galdós no...
ZURRÓN: aforismos inéditos de José Ramón Arana.
-
La prosa ensayística formó parte insoslayable del quehacer literario de
José Ramón Arana. Si se rastrea con cierto detenimiento su obra, no es
difícil ...
Derecho de huelga en un Estado de Derecho
-
¿Tiene sentido el derecho a la huelga, tal y como está configurado
actualmente en nuestro país, en el seno de un Estado democrático y de
Derecho? En mi op...
Querían sin querer saber.
-
Creí que encontré el camino.
Me atreví y agarré el sendero,
donde luchaba el guerrero.
Aguantaba, a la luz, la mirada,
aunque el destello lo cegase
y la pupi...
LA SOLEDAD DEL POETA, LA SOLEDAD DEL POEMA
-
No alcanzo a comprender el afán de críticos e historiadores por
encasillar, o de los mismo poetas, por sentirse miembros de una generación,
de un grupo, d...
He vuelto
-
Después de varios meses de intenso trabajo (y posterior descanso), regreso
por aquí con fuerzas renovadas. Espero que os gusten las publicaciones que
vayan...
Diario
-
Siempre me ha parecido un insulto terrible que los padres decidan traer un
hijo a este mundo de dolor y miseria, sin ninguna posibilidad cósmica de
que es...
Los años heroicos
-
No cuentan, Los años heroicos del Tour de Francia (1903-1914) de Ignacio
G. Iglesias, si tras la primera etapa del Tour de Francia, disputada el 1
de juli...
PERSPECTIVA
-
*Subió, subió y subió. Cuando llegó a la cima, se aproximó al borde y miró
hacia abajo; veía a la gente minúscula y vulnerable. Cuando tuvo que bajar, ...
Kumpulan Foto Ngentot Memek Tante Girang
-
Dalam kesempatan ini akan kembali berbagi Berita unik kusus untuk 18
keatas, yang datang dari Foto memek Tante Girang, yang akan menghibur anda
semua, tent...
Computados como imputados reputados diputados
-
Delito es quebrantar la ley (y esta ha de ser igual para toda la
ciudadanía).
Si un juez o un funcionario dictan a sabiendas una resolución injusta,
comet...
¿Se puede? Cuatro fogonazos sobre las elecciones
-
Esta historia empieza con un país en crisis. La mayoría de sus habitantes
no cree ya en sus políticos, que son todos una casta de corruptos. No nos
represe...
La confesión de doña Virtudes -Capítulo Vigésimo-
-
. Encarna siguió narrando lo que mi padre le contó en el encuentro del
hotel, pero si le digo la verdad, don Román, ahora no podría poner en pie
esa histor...
¿Venís a tocar a mi casa?
-
No esperaba iniciar este día con música cañera - y de la buena - a las 12
de la mañana. Nos han regalado un poquito de los Rolling, un poquito de
Loquill...
“Un sueño”, de Yasmina Reza
-
He tenido un sueño. Mi difunto padre me visitaba.
–Vaya –le dije–, ¿qué tal? ¿Has visto a Beethoven?
Se enfurruña y menea la cabeza, enojado y triste:
...
Compota de membrillo
-
Hola amigos!!. Ya hacia tiempo que no publicaba nada, !espero que no os
hayáis olvidado de mi blog!. Hoy he hecho compota de membrillo y lo voy a
compart...
Acta de la tertulia del 15 de noviembre de 2012
-
Sobre las 20:30 horas del 15 de noviembre de 2012, seis de los efebos
mercuriales, José Manuel Gómez, Jesús Cotta, Alonso Coca, Jaime Galbarro,
Ramón Simó...
Black cypress
-
Today I only know
That I have failed to write my name
on the bark of the black cypress,
in the graveyard with the fallen leaves,
Nor did I eat the fruit
Of...
4 comentarios:
Muchas gracias Ridao por la dedicación de la entrada, ya es la segunda que tengo tuya y cuando estés en el taco y seas un escritor de "éxito" podré venderlas o, al menos, ronear de ellas.
Tengo la caña echá, con varias carnás, para ver si encuentro un libro impagable e imposible, casi, de conseguir de este mismo estilo pero de Pericón.
Si lo encuentro será un placer compartirlo contigo y con todo aquel que, como nosotros, se sienta conmocionado por estas pequeñas pero encantadoras cosas.
Un abrazo maestro, muchas gracias.
Ole, ole y ole,
y el que no diga ole...
Pues si, mucho arte y mucho hambre. Pero a los demás nos queda la alegría y la pena de su cante.
Un abrazo
Gracias a ti, Rafael, por compartir, aunque lo de maejtro lo dejo para los flamencos. No te lo pierdas, que al buscar información para la entrada no encontraba nada de El Peste, hasta que di por Internet con un libro escrito en inglés: The Flamencos of the Cádiz Bay, escrito en los años 60, con más información que muchos libros españoles. En Internet sólo dan dos capítulos, creo que lo voy a pedir en Amazon.
... que se le seque la yerbabuena.
Y ya es mucho, Mery.
Abrazos caracoleros.
Publicar un comentario