Son muchas las diferencias entre este cuaderno electrónico denominado blog y el cuaderno tradicional de papel. Aunque se ha escrito mucho sobre el particular intentaré dejar aquí mis impresiones, esperando aportar algo nuevo.
1. El blog es una herramienta de publicación, y esto constituye quizá su mayor atractivo. En el momento en que se cuelga una entrada ésta queda en la red a disposición de quien quiera leerla en una transacción directa escritor-lector, sin necesidad de usar un intermediario como es el editor. Por su parte, el cuaderno sólo sirve para quien lo escribe, que si quiere publicarlo debe encontrar editor. Gracias a esto el blog supone un fuerte aliciente para escribir, mientras que muchas veces da pereza escribir en un cuaderno. Hay que tener en cuenta que la publicación en un blog es efímera, pues una entada “tapa” a la anterior. Aunque siempre se puede acudir a entadas antiguas es raro que se haga.
2. El blog es interactivo; permite comentarios. Esta peculiaridad es quizá la mayor diferencia entre el blog y el cuaderno tradicional.
3. El cuaderno es íntimo y privado, mientras que el blog queda expuesto, por lo que no tiene ese carácter. Eso condiciona mucho a la hora de escribir, pues no es lo mismo hacerlo para uno mismo, donde no hay restricciones, que para un público más o menos amplio pero en todo caso anónimo. Así, muchos escritos de carácter íntimo nunca verán la luz en un blog, aunque sí los privados -no hay que confundir intimidad con privacidad, pues la segunda es susceptible de ser compartida, a diferencia de la primera (mi blog es un ejemplo claro de esto)-. Una manera de combatir esta limitación del blog es el uso de seudónimos, que está muy generalizado.
4. En un cuaderno se escribe cuando a uno le apetece, mientras que cuando se cuelga una entrada en el blog se suele escoger el momento teniendo en cuenta aspectos como la posible audiencia que tendrá la entrada, la época del año en que se escribe, la frecuencia de publicación, etc. Por ejemplo, en tiempo de vacaciones o en fines de semana las visitas a los blogs bajan, por lo que muchos autores se guardan sus mejores entradas para cuando haya más lectores (aquí estoy yo colgando este rollo en Sábado Santo). Hablando de la Semana Santa, en esta época se suelen hacer muchas entradas relacionadas con esta celebración, y parece que no cuadra demasiado una entrada, digamos, humorística. También sucede que no es conveniente publicar, digamos, cinco entradas en el mismo día, porque se perderían lectores, mientras que en un cuaderno se puede escribir cuanto se quiera de una vez. Por supuesto que hay quien no presta atención a estas cosas y cuelga lo que quiere cuando le apetece, pero no es lo más normal.
5. Generalmente las entradas de un blog deben ser breves (yo ya me estoy pasando), debido al sistema de lectura que se suele utilizar, generalmente muy rápido. En un cuaderno se puede escribir si se quiere una novela entera (que conste que hay novelas escritas en blogs, pero no es el mejor medio para publicarlas).
También existen conexiones evidentes entre ambos medios:
1. Gracias a la herramienta de borrador que tienen los blogs éstos se convierten prácticamente en un cuaderno, y después se publica en el momento que se considere oportuno.
2. En muchos casos no se escribe directamente en el blog, sino que se hace a mano en un cuaderno que luego se pasa al blog.
Y seguro que me dejo muchas cosas en el tintero, pero aprovecho las ventajas de la interactividad para que seáis vosotros quienes las apuntéis.