Me ha dado hoy mucho que pensar un comentario de Rafael sobre mi propuesta de ajuste estructural del Ministerio de Dientes Caídos, cuya cartera, como es bien notorio, está en poder de un elegante roedor desde los tiempos del jurásico. Dice que "la riqueza del ratón Pérez es infinita". Ya puestos, aprovecho para reconvenir con una colleja en to er bebe a aquéllos que han puesto en duda la autenticidad y carácter corpóreo de este ratón; me refiero mayormente a Rocío, que ha soltado una sarta de disparates, insinuando que soy yo el que pongo de mi bolsillo los cinco euros, como si la cosa estuviera para comprar dientes a precio de oro. Dicho esto, paso a exponer mis cavilaciones.Digo yo que si el ratón Pérez tiene acceso a cuanta riqueza desee, podría traer billetes de cinco euros a todos los niños del mundo, no sólo de España. Incluso le sería indiferente que sus contribuciones ascendieran a 10, 20 ó 50 euros. Todos sabemos que no tiene sentido que un niño pequeño ande por ahí con un billetaco, así que se le podría dar un cambiazo, del tipo "mira, un burro volando" y... ¡flop! el billete de 50 € pasa a nuestro talego a cambio de un billetito de 5 € preparado al efecto. De este modo, cada diente contribuiría con 45 € a la economía familiar, más el efecto indirecto que supone el gasto de 5 € que han quedado para el niño después del timo, que levantaría el sector de golosinas, juguetes y chorradas diversas con el logotipo de Bob Esponja (capital que huye hacia USA, por cierto). Que esos 45 € por diente son insuficientes: pues no hay problema, el ratón es rico por vicio, puede traer cien, doscientos, quinientos euros...
Solucionado el problema de la crisis, ¿no? Incluso a los renegados que no creen en el ratón (habrá que ver sus dientes) se les podría convencer diciendo que se inventa un ratón de mentira que haga el trabajo.
Y yo me pregunto: ¿Dónde está el truco, si es que lo hay? ¿Interesaría a algún partido fichar a Pérez como futuro presidente del Gobierno? Sólo se me ocurre una pega: como se entere quien yo me sé secuestra al ratón y lo mete en un zulo hasta después de las elecciones.
P.S. El Tato tiene prohibido participar, que está siempre poniendo gráficas de Economía y es capaz de arruinar la carrera del candidato Pérez.
P.P.S. Si no hay comentarios lo interpretaré como un acuerdo tácito, y se pondrá en marcha la campaña electoral.
10 comentarios:
Monsieur RIDAO:
Algunas veces estoy yo por arrancarme los dientes a ver lo que me deja...
Salu2 ratonpresindeciales.
¡Viva el ratón Perez!
¡Viva el Ridao, que se ha convencido de la riqueza infinita de ese roedor!
¡Viva los cuatros niños del Ridao, que le van a solucionar la cuesta de Septiembre, con sus dientes ebúrneos y angelicales!
¡Viva todo el que crea en el ratón Pérez y en los Reyes Magos!
Gracias Ridao por tu dedicatoria, eres grande. Un abrazo.
P.S. Verás, como bien dices, cuando llegue el Tato y nos desmonte el tinglao que estamos preparando para llevárnoslo calentito. ¡Viva el Tato!
No pongo un gráfico porque se me ha acabado la tinta de la impresora... so mamón.
Por cierto, como se entere Trichet de que lo estás llamando maldito roedor te tira la máquina de fabricar grilletes, digo billetes, a la cabeza. Es que esta historia me suena un huevo, y cuando el huevo suena... es que es un Kinder sorpresa.
Cambio abrazos por bonos del Estado
P.S.: Coño, Rafael, tu coletilla ha sonado a aquello de hoy hace un día cojonudo, verás como llega un cabrón y me lo jode... ;-)
¿Pero no hay ya un candidato Pérez? Dos, sería excesivo.
Mira Ridao,lo que te pasa es que ere mú agarrao,y te quieres ahorrar los 5 euros,pa tus niños,pobrecillos,después no te quejes cuando te hagas mayor,y te metan en una residencia,que es donde vas a acabar,aunque no te preocupes,que yo soy mu buena persona y ya iré a llevarte unas sopitas de avecrem,pa que no estés desnutrido,y algunas revistas xxx,pa que se hagan mas cortas las noches, o mas largas vete tu a sabé,anda dale a los niños sus 5 euros por diente,y deja de dar ideas,pa tené a un ratón de presidente,pos lo que nos faltaba¡málditos roedores!.
Vamo si yo voy a la moncloa y me encuentro allí al ratoncito pérez,ocupando el sillón del zapaterito,alucinooooooooo.
Luis, el otro Pérez candidato es una rata.
No sé por qué mi primer comentario no fue publicado,¿ se lo comería un Faisán?
No colaría, Dyhego, Pérez es ratón viejo...
¡Viva Rafael! ¡Viva la iglesia de San Nicolás! ¡Viva nuestro padre Jesús de la Salud¡ ¡Viva la Blanca Paloma! ¡Viva Pérez el ratón! Y muchos vivas más...
Tato: te has comportado, sólo has insinuado la solución al enigma, y como podrás ver nadie ha dado en el clavo, ergo la gente cree que fabricando billetes se crea riqueza, ergo se debería implantar la Economía como asignatura obligatoria.
Pues no me había dado cuenta, Luis, con tanto Alfonso para arriba y Alfonso para abajo... Ya quisiera parecerse algo al ratón.
Tú sigues en tus trece, Rocío, ¡¡Que el ratón Pérez existe!! ¡¡Que yo no tengo un euro!! ¡¡Que Miguel ¡ya sabe leeer!!
Ojú, NGG, parece que no te cae bien el hombre, aun que ahoraque lo pienso, es verdad, tiene pinta de roedor, aunque a mí a quien se me parece de verdad es al profesor Bacterio.
Abrazos.
Ridao,cariño tu no hagas ni caso a la Rocío que es mu cateta,claro que existe el ratón pérez,y además está forrao,yo ando a ver si lo pillo,como estoy divorciá y estoy buscando un forrao,aunque sea un ratón,y pa que vea que me acuerdo de ti,que estoy en la otra punta del mundo y escribiendote,y si te llevan a una residencia,que sea a la mia,en Marbella y allí no se come avecrem,y si`ponen al ratón de presidente a mi que me pongan de presidenta de los estados unidos,que no veas el obama lo mal que lo está haciendo,y yo los dineros los manejos mu bien.
Tato, nada más lejos de la realidad.
Sabes de mi respeto por todo lo tuyo. El problema era que al ratón Pérez, si hay algún ingrediente que le viene mal es el realismo y de ese ingrediente, tú, andas sobrao.
Saludos
Me quedo con la copla de tu residencia, Paqui. Ya me harás un precio especial, ¿eh?
Anda que no, Rafael. Y más reales todavía, los Reyes Magos. Irreales, los políticos.
Abrazos virtuales (qué se le va a hacer).
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