Caen las hojas, de los árboles y de este diario que tiene algo de otoñal, pero de un otoño artificial, de cartón piedra, que palidece ante la melancolía de septiembre.
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Aún no me acostumbro a mi nuevo hogar. No es que eche de menos el antiguo, pero me siento extraño como nunca lo he estado al vivir en un sitio. Y eso que mis hijos se encargan de llenar los espacios de risas y de gritos, y que nos hemos traído puesta la felicidad. Me figuro que sucede como con ese traje nuevo, flamante, que estrenamos en la adolescencia y parecía más bien que el traje nos llevaba a nosotros, hasta que conseguimos domarlo a base de paseos en domingo de Ramos.
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La afectación es el principal mal de los escritores.
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No tengo muchas cosas claras en la vida, y de hecho no debería tener ninguna, pero si hay algo de lo que estoy convencido es de que en mi vida profesional no quiero tener ningún puesto directivo, ni asumir más responsabilidades de las que por la naturaleza de mi trabajo me correspondan.
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¿Y qué interés tiene lo que cuenta ese escritor de su vida, anodina donde las haya? Nunca hay que olvidar que no interesa su vida, sino cómo la cuenta y qué saca en limpio de ella.
19 comentarios:
Monsieur RIDAO:
Si no me interesaran tus entradas... ten por seguro que no te seguiría.
Salu2.
Como dice Alfonso Guerra...nuestro hogar es el que tuvimos de niños..en nuestra casa...lo demás...son lugares para vivir...
Traqui Ridao...al final lo haras tu lugar cotidiano...e incluso ¡TE GUSTARÁ UN MONTÓN¡¡¡...eso sí...¡como en casa...en ningún sito¡¡
BESOTES
Y bueno...a los estilistas les gusta solo como cuentan las cosas...a mí me interesa las dos cosas...lo que se cuenta y como se cuenta....
Besitos
Muy verdadero el tercer apunte; honesto el cuarto; pero si tuviera que elegir uno, me quedaría con el segundo. Excelente.
El último apunte es maravilloso, amigo. Es así, pero se empeñan en no darse por enterados.
Un nuevo hogar siempre es raro, ¿no? Pronto te ubicarás en el trono, seguro.
La afectación es una memez. Suele lindar con la cursilada.
Y nada más, salvo un apunte propio: ya sé que no aparento tal, pero hace tiempo que entré en la década prodigiosa. Qué mosqueadillo te noto porque me vieron joven. ¡¡Pero si es así!!
Abrazos, querdio R.
J.
Gracias, Dyhego. "De coeur".
Mira que era listo Guerra, mangeles. Y lo sigue siendo.
Coincidimos, Sara. Ahí busqué mucho el estilo. Gracias.
¡Coño, J. No sabía que pasabas de los 50! Qué bien los llevas, picarón. Yo te hacía 48 ó 49, a lo sumo.
Abrazos cincuentoneros.
Ridao,te veo mú meláncolico,el hogar está donde esté uno,ni más ni menos,yo también acabao de mudarme,y estoy en mi nueva casa hecha una reina mora,además iba a cambiar de curro y me han suplicao,como te lo digo que no me vaya,hay que ve lo imprecsindible que soy,y por si esto fuera poco,hoy me ha llegao una transferencia al banco que esperaba,y to eso seguíiiio.
Espero que disfrute de tu peazo chalé,y construye ya una piscina,aunque sea del ikea,que co en las ambercas no cabo.
Un beso casero.
Aunque me aconsejaron que usara otro seúdonimo para comentar aquí,no quiero quitarle a usted el placer de dármelo, ni a mí de recibirlo.Aclarado esto,quisiera felicitarlo por BLOGUEÍNA fantástica mezcla de humor y ternura. Sinceramente Gracias.P.D:Y no creo que sea correcto quedar para que me entregue el,o los premiosssssss... porque pienso seguir comentando como TROYA.Saludos
Me han encantado los dos primeros. Qué bien llevao.
Un abrazo.
Lo más importante de las casas son sus habitantes,Enhorabuena Rocío.
1- das en el clavo: las estaciones son , antes que nada, estados de animo.
2- las casas tienen su vida propia (hay un poema de Caesar Vallejo muy bueno y mi hija tiene un libro infantil sobre el tema) Es decir, probablemente lo que estas sintiendo es la casa, que aun no se acostumbra a ustedes, no a la inversa, dale tiempo, eso de andar con chiquillos gritando todo el dia no es facil..
3- si, si, claro...en hora buena y en hora mala
4,5. son consecuencias del punto 1...
El único mal de los escritores es aburrir a sus lectores; Ridao tranquilo tu estás muyyyyyyyyyyyyyy lejos de eso.
Te dejo que este otoño de cartón piedra que dices tu me está helando las manos (aquí hace ya un frio que pela)
Pues mientras las hojas caen, os vais amoldando al nuevo hogar, sigues teniendo claro que no quieres un cargo directivo y nos deleitas con esa forma especial de contar lo que te pasa, hay algo que desde luego sé que tú no tienes( y ya llevo un tiempo "andando tras tus escritos"): afectación. Besotes y a disfrutar de esa nueva casa, que seguro que muy pronto va haciéndose a vosotros.
Quillo Ridao a mi me gusta el otoño, y te aseguro que no es de cartón piedra.
De los distintos hogares que he tenido la suerte o la desgracia de vivir siempre recuerdo el olor de cada uno de ellos.
Otra cosa, usted como escritor por lo menos a mí me gusta.
Y lo último ¿el nuevo trono que tal?, lo digo por los olores del hogar nuevo.
Un estrechón de manos.
Ridao cariño,esa casa tuya con tantos niños no debe se nada aburrida,yo saldría corriendo pero claro,yo soy lapaqui.com,y mi casa es como yo un poco revuelta,pero me gusta estar en ella.
Deja de imaginarme encima un monte,que te va a dar un ataque de risa.
Y esto pa la Rocío,me alegro muchísmo de las cosas buenas que te acaban de pasar,esa invitción debe ser de escándalo,pa celebrarlo.
Un beso toreril.
1-Viva el Otoño, la mejor estación de todas.
2-Esta vez me quedo con el final del segundo apunte.Una buena tanda de naturales.
3-No sé que cojones es eso de la afectación. Yo soy más de follar.
4-Yo no tengo nada claro en esta vida.
5-Te voy a ser sincero.Me importa tres cojones lo que escribes.(Es broma). Estoy aquí por y para la la Paqui.(Es verdad)
PS: Si hay fiesta de celebración en la que esté Dña Francisca, invíteseme. Voy a ir con el traje de luces y el estoque de entrar a matar.
Escasso,cariño mío si que hay fiesta de celebración y si tu vienes vestío con el traje de luces,yo me visto de bombilla,pa que me veas bien,yo tampoco se lo que es eso de la afectación yo solo entiendo de temas carnales,que es de lo que hay que entender.
Ridao a mi me gustan toas las estaciones,y toas las casas en las que he vivido,ya que siempre procuro ser feliz en cualquier sitio,aunque sea en lo alto un monte como las cabras.
De melancólico nada, Rocío, es una pose intelectualoide, jeje. Enhorabuena por tu nueva casa y por todo. Te sales.
Bienvenida, Troya, no sé a qué te refieres con eso de los premios. A ver si alguien me lo explica, por ejemplo Romano, que dice que tiene uno muy gordo. Muchas gracias de verdad por tu felicitación.
Gracias, Fernando. Lo que me perdí el otro día...
Di que sí, Bea. Y sus habitantas, como diría aquélla.
Abrazos.
Abrazos.
Muy agudos y certeros tus comentarios, Eutelia. Gracias.
Muuuuuuchas gracias, MPVX2. Qué suerte, yo también quiero un poquito de frío.
Eso, Marisa, que se haga a nosotros, que yo no pienso cambiar. Frente a la afectación hay que estar siempre en guardia, creo yo.
El nuevo trono es una cagada, Naranjito. Chico como sus muertos, y sin sitio para el portátil. Espero que no me afecte demasiado. Gracias.
Paqui y Escasso: vosotros mismos, esto prospera. Sólo espero evitar escenas pornográficas en mi blog, que lo leen niños, jeje.
Abrazos celestineros.
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