lunes, 8 de junio de 2009

Funerales blogueros

Hoy, como es lunes, me voy a poner tétrico. ¿No se os ha ocurrido qué pasará el día que hagáis vuestra última entrada, no ya porque os habéis hartado del blog, sino porque llegó vuestra hora final? Ya hablé de esto en una ocasión en mi cuaderno, aquí, donde me refería a que nuestro blog vagaría errante por el hiperespacio sin ningún signo de actividad, pero hoy lo que se me ha venido a la cabeza es que seguro que alguien da la noticia, no en vano todos tenemos comentaristas que son amigos en la vida real. La noticia se dará, como es lógico, mediante un comentario en el blog del finado. ¡Menuda sorpresa la de los comentaristas habituales! Es previsible que se multipliquen las condolencias, incluso que se bata el récord de comentarios, algo de lo que por desgracia no podrá disfrutar el dueño del cuaderno. Habrá quien deje flores virtuales, no lo duden, y seguramente se instalarán en otros blogs capillas ardientes de muy diverso tipo, alguna con la posibilidad de dejar ofrendas.

Da que pensar, y mucho. ¿Y si el difunto era discreto, partidario de no hacer ruido ni siquiera en su última hora? Mucha gracia no le haría todo ese tinglado, digo yo... O a lo mejor me equivoco, y todo lo que digo son suposiciones sin fundamento. Es caso es que el bloguerío es tan reciente, y yo soy tan nuevo en él, que aún no se me ha dado el caso.

P.S. Largarto, largarto...

P.P.S. ¿Y si algún gracioso simula su muerte?

17 comentarios:

Ricardo Arjona dijo...

Esta entrada es de muy mal gusto tras nuestra última conversación y mi actividad en el día de hoy

Olga Bernad dijo...

Por Dios, Ridao, que es lunes y acabo de llegar al tajo. Déjate de capillas ardientes:-)
Oye, pero yo leí en alguna parte que un bloguero estaba tan superado por su propio éxito y su propio enganche a su propia repercusión que simuló su propia muerte, en serio.
Cosas veredes...
Abrazos mañaneros.

Juanma dijo...

Que digo yo que no había otro temita para hoy, ¿no? ¿Estreñimiento, Ridao?
Podías haber comentado los 2 cumpleaños 2...al fin y al cabo, saliste vivito y coleando de ambos.

Bueno, miarma, que cruzo los dedos, que toco las maderas, que hago lo que sea para retrasar el momento.

Un abrazo.

Juan Antonio González Romano dijo...

Pues sí que lagarto, lagarto. Hay otra posibilidad que no contemplas: que el finado deje programadas muchas entradas y el blog le sobreviva. Algo así como "Blog más allá de la muerte", muy quevedesco.

Un abrazo.

Er Tato dijo...

A esta entrada le viene al pelo este artículo.

Lo tenía guardado para hacer una entrada similar a la tuya un día de estos, pero como me la has pisado, te lo regalo. ;-P

Un abrazo

Alejandro Muñoz dijo...

Pensé igual que Juan Antonio, siempre puedes dejar programadas 4 ó 5 entradas a un par de años vista. Lo malo sería comprobar que contesta a los comentarios, eso significaría que hay Internet en el más allá o que la parienta ha encontrado las contraseñas apuntadas y se lo piensa pasar de miedo. Eso sí, es la mejor forma de que hablen bien de uno.

Permiso, ¡Ricardo! ¿has aterrizado ya?
Da señales de vida en cuanto que recuperes la conexión que sé de uno que se está visitiendo ya de negro.

Jesús Cotta Lobato dijo...

Si sigo blogueando para cuando la esté palmando, contestaré desde el más allá, estoy seguro. Pero lo que me gustaría es que fuesen a mi misa de difuntos. Un abrazo.

Mery dijo...

Ay, madre, qué susto.

Yo conozco el caso que comenta Olga y lo viví de primera mano. Tremendo, qué manera de jugar con la gente.

En fin, que no estoy para pensar esas cosas hoy (aunque te confieso que las he pensado cien veces).

Un beso, nada tétrico

José Miguel Ridao dijo...

Ricardo, si se ha estrellao tu avión dímelo, que aunque no tengas blog igual cuelgo unas florecillas en el mío.

Eso es heavy, Olga. Pa matarle de verdad... Reconoce que el tajo se te ha hecho más llevadero después de leer mi entrada. Todo se habrá relativizado bastante;-)

Mucho mejor esto que los cumpleaños, Juanma, dónde va a parar. Es que esta vez he decidido que sean los demás los que se jiñen...

Pero muchas entradas, Juan Antonio, muchas. Yo pondría paráfrasis de Quevedo (ojo, no de Lope), para crear ambiente.
Ah, y en andurriano se dice largarto, no lagarto.

Pues sí que te la he pisao, Tato, pero tú hazla de todos modos, que ya se sabe que no hay nada nuevo bajo el blog. Lo importante es cómo se cuentan las cosas.

Álex, me inclino más por la versión de la parienta, no creo en un más allá informatizado. Y lo de hablar bien de uno ya lo hacemos. ¿No ves que estamos todos siempre dándonos abrazos y echándonos flores? Por si no te has dado cuenta, los blogueros piensan que sus colegas no tienen abuela (reservo esto que se me ha ocurrido para mis bloguerías).

Bueno, Jesús, se puede emitir la misa en directo vía blog, seguro que hay un modo.

Es cierto, Mery, recuerdo que una vez lo comentaste en tu blog, creo que era un mejicano. A quién se le ocurre...

Un abrazo escatológico (de los que no huelen).

Liliana G. dijo...

Ridao, sí que lo he pensado en un rapto de narcisismo pseudoliterario. Mis posibilidades serían más bien limitadas (en el más aquí y en el más allá).

Los amigos que me concen personalmente no tienen blog, nadie sabe mi clave de acceso y como si esto fuera poco, mi ínfima cultura cibernética no me permite programar entradas póstumas.

Por lo tanto lo más problable es que como has dicho, mi blog vague errante por el espacio virtual, llenándose de comentarios que se trocarían en preguntas. Un poné: "Querida Lili ¿qué te ha pasado que ya no gozamos de tus excelsos poemas?" (Bueno, o más o menos)

Por lo que optaré por dejar una carta a modo de testamento, con mi clave personal, y una entrada póstuma que mis deudos estarían obligados moralmente a cumplir...

¿Pero te parece que tengo estar pensando el funeral de mi blog en día lunes?
Ay de tus ocurrencias José Miguel...

¡Ah! Tenemos una diferencia horaria de cinco horas. Besos.

Pasión dijo...

Hola José Miguel, por ahora sé de un bloguero joven que murió en un accidente de coche, su hermano se encargó desde el mismo blog de comunicarlo, una pena.

Yo no tengo ese problema, el día que deje de escribir que navegue...

Precisamente hoy ha entrado en mi blog una colombiana, qué ilusión, ella navega.

Abrazos alegres

maite mangas dijo...

Llego a casa después de un largo día y me encuentro con esta bonita reflexión al atardecer. ¡Qué buén rollito!, pensaré en ello mientras hago la cena. Felices sueños.

Julio dijo...

Tú estás hoy que no te aguantas, ¿eh, Ridao?

José Miguel Ridao dijo...

Bueno, Liliana, para dejar un comentario no hace falta clave de acceso. Supongo que tus amigos nos darían la nueva. Oye, el poné ese es bueno, y cierto. No te preocupes, tú cuando te mueras me lo dices, y así yo estoy al tanto, y digo que estás preparando el poema de tu vida, y a los dos o tres años cojo y planto un poema escatológico de los míos, te ibas a reír de lo lindo, allí arriba.
Por cierto, ¿has visto con qué naturalidad hablamos del más allá? Así nos reímos mientras estamos más acá.

Me gusta tu alegría, Pasión, hasta en la escatología, valga el ripio. Me alegro de que tu blog se vaya volviendo internacional.

Maite, qué bien que te he alegrado el día, no hay nada como hablar de estos temas para recuperar el optimismo.

Acertaste, Julio, llevo unos días que no me aguanto. Ya pasará...

Un abrazo tristalegre.

Javier Sánchez Menéndez dijo...

José Miguel, lagarto, lagarto.

Y a ser posible con un 5J de aperitivo.

Capitán Paralelo dijo...

Miguel, mala suerte, no tienes que poner flores, no estoy en el otro mundo. Lo que si te confirmo es que desde el Nuevo Mundo se puede seguir comentando

José Miguel Ridao dijo...

Oye, Javier, dicen que los lagartos están buenísimos. Y con 5J... A ver si los pedimos mañana y lo regamos con un buen vino, y no ese Azpilicueta.

Vaya, Ricardo, yo que había encontrado unas flores chulísimas llevadas por esqueletos. Guardaré las fotos para mejor ocasión...

Un abrazo.