En ocasiones me dedico a escribir sobre cosas tristes cuando estoy alegre y sobre cosas alegres cuando estoy triste, y no se me da del todo mal.
***
"A veces echo de menos a la vida como a una novia que nunca tuve", dije aquí mismo. Y ahora, desde la distancia que me permite leerme como si fuera otro quien lo escribió, sé que es un sentimiento puro.
***
Los ejemplares más feos de la especie humana se pueden avistar cada día empujando sus carritos por los pasillos de cualquier hipermercado.
***
El sentido del humor es el menos común de los sentidos.
***
He descargado en mi reader los poemas de Verlaine, y se me hace la boca agua, no sólo por los poemas, sino también por el escándalo de los puristas.
***
Siempre me ha intrigado el hecho de que donde las mujeres ven dos mamas los hombres vemos dos tetas. ¡Rebajar la cúspide erótica a una glándula...!
22 comentarios:
Los puristas, calladitos, imagina lo que diría el propio Verlaine al verse en una pantalla milagrosa.
Yo creo que le parecería charmant.
En cuanto a tu primer párrafo, estoy totalmente de acuerdo. Eso de ficcionar a toro pasado suele dar muy buenos resultados.
Buenas noches, comme toujour
Monsieur RIDAO:
¡Discrepo de usted en su apreciación del humor! ¡Pero si no hay político, actor, artista, empresario, miss, etc, etc, que no diga que tiene un gran sentido del humor! Lee cualquier entrevista, CUALQUIERA, y verás como antes o después o el entrevistado o un allegado dicen que fulanito de tal tiene un gran sentido del humor...
Vamos, yo, nada más salir a la calle veo más humor que contaminación...
Salu2 humorísticos.
Yo creo que Verlaine fliparía en colorines, Mery. Le escribiría unos versos al reader.
Anda que no, Dyhego, cuanto más sieso es uno más afirma tener sentido del humor. El de los políticos es un caso preocupante.
Abrazos charmantes.
A propósito de...
Pincha aquí:
http://bajoelsignodelibra.blogspot.com/
Otra vez buenas noches, J.M.
A mí me gustan los blogs con sentido del humor. Para tristezas, ya está la calle. En cuanto a tu último comentario sobre las cúspides, que me recuerdan un hermoso soneto tuyo, discrepo. Yo no me imagino la palabra "mamas" en labios de una mujer, sino en labios de un médico decimonónico y siniestro que reduce al ser humano a mamífero sin pelo. Un abrazo.
¡Anda, qué casualidad! Yo estoy ahora mismo con el reader, leyendo Romances sans paroles. ¡Una maravilla! Gracias.
Pues es verdad, Jesús. Pero las mujeres no suelen decir "tetas", ésa es una palabra más bien nuestra. Ellas dicen, por ejemplo: "Huy, José Miguel, ¿has visto cuánto pecho tiene esa chica?", y yo respondo, un poné: "Ole, ole, ole, vaya par de melones" (melones tiene una carga erótica aún más fuerte que tetas).
Ahora que lo pienso, estoy hablando de tetas mientras leo a Verlaine. ¿Lo aprobaría la sociedad de poetas antiebookana?
Puf, basta leer los poemas de Verlaine para saber que lo de tetas se queda así como infantil, casi.
Date cuenta, el poema de Hommes, un suponer.
No estoy de acuerdo con la cuatro.
Ya lo decía nuestro querido loco don José: "el sentido común, el menos común de los sentidos".
Por cierto, en los autobuses de Tussam sí que se ven especímenes feos.
Y perdona esta incursión, menuda torta se puede llevar el médico de Cotta cuando le suelte a la paciente eso de ¿mamas?
Un abrazo para ambos.
Mery, me has picado. Acabo de descargarme en el reader (de gorra, of course) "Hommes". Dieciocho páginas de las que espero dar cuenta pronto. Esto es una maravilla.
Que no, Álex, que los más feos del mundo (después de los gorrillas del Rocío) están en el Carrefour. Otro abrazo. Y un beso para Mery.
Me voy p'al sobre, que ya me vale.
Escribas lo que escribas siempre das en la diana, Ridao, no le des más vueltas. Y... ¡es cierto! no hay personas más feas que las que empujan el carrito del súper. ¿Cómo nos verán a nosotros los demás cuando empujamos el nuestro?
Gracias a tu comentario me acabo de dar cuenta de que vos y yo somos un par de originales. ¡Arriba el buen humor!
Besos mil.
P.S.: Está bien que estoy que me salgo, José Miguel, pero de allí a llenar mi blog de florcitas... no sé... no sé... creo que se pasa de mariconada :)
¡Te vi! ¡Vi tu sombrero! ¡Estás! Cuentos a la luz de la luna se ha engalanado con el gran Ridao. ¡Gracias!
a mi me pasa lo contrario...
echo de menos la vida como a cualquiera de las novias que tuve...
las que no tuve, hoy desde la distancia, tampoco eran para tanto...
pero volver a descubrir tanta guarrería otra vez...
¿tendrá los pezones chicos o grandes?...
¡qué maravilla ese momento de revelación!...
Pos yo Ridao,debo ser muy bestia,o mu directa,pero jamás me he referido a las tetas,como mamas,o pechos,yo siempre digo las tetas,que es lo que son.Ahora mismo voy a leer a Verlaine,hace tiempo que no sabía naa e el,se me había olvidao su existencia,gracias por volver a ponerme al día.
Lo de los tio feos,es verdad,yo me cruzo con cada uno,que me an ganas pagarle una cirugía estética.
Un beso tetero.
Cada vez que quiero dejar un comentario y Rocio ha comentado antes, me anula: dice lo mismo que querria decir yo, y ademàs es mucho mas simpatica....!
deberè apurarme next time....
Liliana, yo pienso que los demás nos ven igual de feos que vemos nosotros a ellos. Así estamos todos contentos, que reventamos de guapos. ¿Te acuerdas de la rosa que te regalé una vez para eliminar los malos olores? Si ya hace tiempo que te lleno el blog de mariconadas... la última, el tío del sombrero.
Cagüendiez, me he leído el comentario suprimido y ahora no lo recuerdo. A ver si hago memoria, seguro que contiene información clasificada.
Sí, eresmicruz, y lo mejor es descubrirlo a través de una camiseta ligeramente humedecida... no sigo. Oye, ¿te encuentras bien? No has puesto ningún enlace.
Anda que no, Rocío.Si es que algunas vais por la vida a tetazo limpio.
Y eso que es de Málaga, Eutelia, que todo el mundo sabe que en cuanto a gracia y salero está a años luz de Sevilla.
Abrazos chulescos.
¡Como para no acordarme! La sorpresa más morrocotuda fue abrir mi blog de poesías y encontrar en el costadito una tremenda torta, que de tan real impresionaba. Luego la conciencia te traicionó y me regalaste la florcita, jajajajaja
Ay, madre mía, por qué me hacés tentar de la risa y siempre a deshora... (Recién llego de trabajar y aún no dormí desde ayer, y para colmo ya me despabilé)
Besazos.
P.S.: No sé si se entendió porque a estas alturas no coordino...
Ojú, Liliana, estás en desventaja con el desfase horario. Yo escribo antes de acostarme, con las facultades intactas, y te cojo desprevenida. Le tengo cariño a aquel soneto, es uno de mis preferidos.
Besos.
Publicar un comentario